Llagas en la boca

Se acerca el verano y se hace más frecuente la aparición de llagas en la boca. Las llagas en la boca, también llamadas aftas bucales, son lesiones dolorosas que pueden surgir dentro de la boca, en particular en la mucosa oral, las encías, la lengua o el paladar suave.

Son un problema habitual que afecta a muchas personas, por lo que hoy desde nuestra clínica dental en Sevilla, vamos a hablar sobre sus causas, síntomas, cómo se relacionan con el calor del verano, así como sus métodos de tratamiento y prevención.

¿Qué son las llagas en la boca?

Las llagas en la boca son lesiones orales que generalmente aparecen como pequeñas úlceras redondas u ovaladas con un centro blanco o amarillento y un área roja alrededor.

Son muy sensibles y pueden dificultar la alimentación y la higiene bucal adecuada. Además del dolor, los síntomas comunes incluyen ardor, sensación de quemazón y molestias al hablar o masticar.

Tipos de llagas en la boca

Llagas menores

Son el tipo más común de llagas bucales.
Suelen medir menos de un centímetro de diámetro.
Se encuentran en la mucosa bucal y son dolorosas pero no representan un riesgo para la salud.
Tienden a desaparecer en un plazo de 7 a 14 días.

Llagas mayores

Menos comunes que las aftas menores.
Suelen ser más grandes, con un diámetro de más de un centímetro.
Localizadas en la parte posterior de la boca.
Pueden ser muy dolorosas y dificultan hablar, comer y beber.
Pueden tardar semanas en curarse y pueden dejar cicatrices.

Estomatitis aftosa recurrente

Caracterizada por la aparición de múltiples lesiones en la boca.
Pueden ser pequeñas o grandes y se localizan en diferentes partes de la boca como la lengua, el paladar o las encías.
Muy dolorosa y puede afectar significativamente la calidad de vida.
Puede requerir tratamiento especializado para aliviar los síntomas y prevenir recurrencias.

¿Por qué salen llagas en la boca?

01.

Lesiones o traumas en la boca, como morderse la lengua o los labios.

02.

Deficiencias nutricionales, especialmente de hierro, ácido fólico o vitamina B12.

03.

Cambios hormonales, especialmente relevantes en mujeres.

04.

Estrés y ansiedad.

05.

Alteraciones del sistema inmunológico.

06.

Consumo de ciertos alimentos o aditivos alimentarios.

07.

Infecciones virales o bacterianas.

Síntomas de las llagas en la boca

Dolor en la zona afectada.
Sensibilidad al calor o al frío.
Dificultad para hablar, comer o beber.
Inflamación y enrojecimiento de la zona afectada.
Sensación de ardor o picazón.

Otros signos a tener en cuenta:

Llagas en la boca que pueden ser muy rojas o tener pequeñas manchas blancas en el centro, que podrían sangrar o infectarse.
Hinchazón de las encías, la boca o la garganta.
Dolor o molestia al masticar o al tragar, similar a un dolor de garganta.
Pequeñas úlceras, sangrado o llagas en la boca, las encías o debajo de la lengua.
Presencia de una película blanca o amarilla, parches o pus en la boca o en la lengua.
Aumento de la mucosidad en la boca.
Sensación de sequedad, ardor leve o dolor al consumir alimentos calientes y fríos.
Acidez (agruras) o indigestión.

Cómo curar una llaga en la boca

El tratamiento de las llagas bucales puede centrarse en aliviar el malestar y facilitar la cicatrización. Alguna opciones comunes de tratamiento son:

cONSEJO 1

Enjuagues bucales con soluciones antisépticas o analgésicas

Utilizar enjuagues bucales que contengan ingredientes antisépticos o analgésicos para reducir la inflamación y aliviar el dolor asociado con las llagas.

cONSEJO 2

Medicamentos para el dolor de venta libre

Tomar analgésicos como el acetaminofén o el ibuprofeno para controlar el dolor y la incomodidad causados por las llagas.

cONSEJO 3

Buena higiene oral

Mantener una adecuada higiene bucal mediante el cepillado suave de los dientes y el uso de hilo dental para prevenir la acumulación de bacterias alrededor de las llagas.

cONSEJO 4

Evitar irritantes bucales

Evitar alimentos o bebidas ácidas, picantes o muy calientes que puedan irritar la mucosa bucal y empeorar las llagas.

cONSEJO 5

Cremas o geles tópicos

Aplicación de cremas o geles directamente sobre las llagas para proporcionar alivio localizado y favorecer la curación.

Es importante tener en cuenta que las llagas bucales suelen sanar por sí solas en una o dos semanas. Sin embargo, estos tratamientos pueden ayudar a aliviar los síntomas y acelerar el proceso de curación. Si las llagas son recurrentes o persistentes, es recomendable consultar a un profesional de la salud bucal para un diagnóstico adecuado y un plan de tratamiento personalizado.

¿Cómo prevenir las llagas en la boca?

La prevención de las llagas en la boca pasa por tener unos hábitos saludables en nuestro día a día que eviten que se provoquen algunos de los factores desencadenan

Mantener una buena higiene oral:
- Cepíllate los dientes regularmente, al menos dos veces al día.
- Usa hilo dental diariamente para eliminar los residuos entre los dientes y debajo de la línea de las encías.
Seguir una dieta equilibrada:
- Consume una dieta rica en frutas y verduras, que proporcionen los nutrientes esenciales para la salud bucal.
- Evita alimentos muy ácidos o picantes que puedan irritar la boca.
Beber suficiente agua:
Mantente bien hidratado durante todo el año, especialmente en los meses calurosos.
Gestionar el estrés:
- Encuentra formas de reducir el estrés en tu vida diaria.
- Busca un equilibrio entre el trabajo y el descanso para reducir la carga emocional.
Consulta a un profesional de la salud bucal:
- Si las llagas bucales son recurrentes o persistentes solicita una cita con un dentista.
- Podría ser necesario recomendarte un tratamiento específico para prevenir futuras llagas o controlar los factores subyacentes que las causan.

Siguiendo estos consejos y manteniendo una atención regular a la salud bucal, puedes ayudar a prevenir las llagas en la boca y mantener una boca sana y libre de molestias.